Declan Kindelan se ha esforzado
mucho por hacerse un hueco en una sociedad a la que no pertenece,
ayudado por su enorme inteligencia y su gran tesón. Hijo de una viuda
irlandesa, ha tenido que soportar muchas humillaciones hasta lograr un
título de abogado en la prestigiosa universidad de Eton.
Lord Wells es un noble atípico que,
consciente de la valía de Declan, lo contrata como su secretario
personal y encargado de sus finanzas.
Todo irá sobre ruedas hasta que Emma,
hija de Lord Wells, se cruce en su camino. La joven provoca en Declan
emociones que nunca había sentido y cuando éste se dé cuenta de que lo
que siente escapa a su control, hará todo lo posible por alejarse de
ella, incluso empujarla a que contraiga matrimonio con otro hombre.
Me pasa con pocas autoras, pero Lola Rey es una de ellas (ya lo sabéis). Cada vez que publica novela, sé que me espera una gran lectura. Es de ese tipo de autoras que escriban lo que escriban, mantiene o incluso supera el nivel de la anterior. Y no se trata de hacer peloteo es, simplemente, que hay formas de escribir que se te quedan marcadas en la retina y en los sentimientos. Así que cogí con muchas ganas esta historia, deseando conocer qué nos iba a ofrecer esta vez.
